Lo que sabemos de la nueva terapia antitumoral con cannabinoides
Desde que se logró clonar y estudiar a los receptores CB, un exponencial número de estudios y experimentos comenzaron a dilucidar este nuevo SEC y su función como regulador homeostático. El tratamiento de la náusea, el vómito, la falta de apetito, la pérdida de peso y el dolor que las terapias antitumorales provocan en los pacientes, fueron las primeras ideas en revelar que el Cannabis y sus derivados podrían tener un verdadero efecto terapéutico14. Claro está, que la constante estigmatización de la sustancia Cannabis, ha impedido que se utilice en la práctica clínica, pero la ciencia cambia y evoluciona, así también, el concepto arraigado del Cannabis como una sustancia puramente destructiva. Tiempo pasó hasta que los científicos comenzaron a tratar cultivos celulares con cannabinoides y pudieron notar una disminución en el crecimiento tumoral, estamos hablando de Munson et al.15, que en 1975 demostró en ratas con implantación de carcinoma de pulmón humano, un retraso en el crecimiento tumoral tras la aplicación de distintos cannabinoides. Pasó tiempo para que se realizará una nueva línea de investigación a nivel mundial, la cual estamos presenciando en la actualidad.
En la tabla 3 están algunas neoplasias que ya está comprobado son sensibles a la utilización de cannabinoides como verdaderos fármacos antitumorales, estos realizados en cultivos celulares o ratas experimentales9,16, cabe decir que existen muchos estudios que investigan otros tipos de neoplasias, como leucemia, melanoma, glioma, colorrectal, hepatocarcinoma, páncreas, etc. Entonces, ¿podrían o no los cannabinoides ser implementados como una nueva terapia antitumoral en la práctica clínica?, los estudios que avalan sus efectos antitumorales son bastantes, todos se basan en células cultivadas in vitro o in vivo en modelos murínicos; en sus conclusiones los autores sugieren como una constante, comprobar la eficacia de estos mecanismos antitumorales en estudios clínicos controlados. Quizá una de las razones por las que aún no vemos estos fármacos en la clínica, es por el intento de dilucidar los mecanismos moleculares que promueven la apoptosis, el arresto en fase de mitosis G0, inhibición de la angiogénesis y la posibilidad de la célula de hacer metástasis.
El sistema endocannabinoide (ECS) es un antiguo mecanismo de homeostasis que opera desde las etapas embrionarias hasta la edad adulta. Controla el crecimiento y desarrollo de muchas células y linajes celulares. La desregulación de los componentes del SEC puede dar lugar a una proliferación, adhesión, invasión, inhibición de la apoptosis y aumento de la vascularización descontrolados, lo que conduce al desarrollo de diversas neoplasias malignas. El cáncer es la enfermedad de la división celular descontrolada. En esta revisión, discutiremos si los cambios en el ECS son una causa o una consecuencia de la malignización y si los diferentes tejidos reaccionan de manera diferente a los cambios en el ECS. Discutiremos el uso potencial de los cannabinoides para el tratamiento del cáncer, centrándonos en el resultado primario/cuidado: reducción y erradicación del tumor, así como en el resultado secundario/cuidado paliativo: mejora de la calidad de vida. incluyendo dolor, apetito, sueño y muchos más factores. Finalmente, completaremos esta revisión con el capítulo sobre las diferencias específicas de sexo y género en ECS y la respuesta a los cannabinoides, y la igualdad de acceso a los tratamientos con cannabinoides.